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La memoria es un concepto que da mucho juego. La amnesia, por poner un ejemplo, es uno de los recursos más trillados de la industria para situar a jugador y personaje en el mismo punto de salida. Pero la memoria sigue siendo también, en muchos sentidos, un misterio. Que recuerdos guardamos, cuales perdemos, y si podemos llegar a recuperarlos es siempre un interesante debate.

Hablando de recuerdos distantes, precisamente Another Code es uno de esas sagas que vivía en el subconsciente de mucha gente. Junto con Hotel Dusk, de la misma desarrolladora, son dos de las aventuras gráficas más conocidas dentro de las obras de culto de la Nintendo DS. Ahora ha vuelto a nuestros recuerdos gracias a Another Code: Recollection, un remake que junta ambos títulos de la franquicia (Another Code: Two Memories para DS y Another Code: R Más allá de la memoria para Wii) en uno solo. ¿Pero eran de verdad estos dos juegos una buena franquicia, o son nuestros recuerdos los que hablan?

Un lavado de cara

Una de las características más llamativas de esta colección es como se han adaptado un juego de DS y de Wii para que tengan una coherencia estética. La solución ha sido construir de cero los gráficos del original, Two Memories, y adaptarlo a las tres dimensiones desde una cámara en tercera persona detrás del personaje.

Esto quita parte del estilo artístico que tenía Another Code: Two Memories. El dibujo con el que estaba hecho era muy característico y posiblemente fue la puerta de entrada para muchos. En parte se echa de menos, porque era tan característico y se veía tan bien que a veces el nuevo estilo no le hace toda la justicia que debería.

Pero decir que Another Code: Recollection se ve feo sería mentir. Se echa de menos la obra original, pero artísticamente el título cumple muy bien, y sigue manteniendo una buena parte de los recursos que bebían directamente del cómic. Recuerda mucho más en el estilo que tiene Another Code: R Más allá de la memoria, aunque con el trabajo suficiente para que no se sienta sacado de la Nintendo Wii.

Además ambos juegos han pasado al control en las tres dimensiones. Solo este detalle hace que me de cuenta del trabajo que ha implicado estos remakes. Convertir un juego 2D y otro 2.5D en un motor 3D con movimiento libre conlleva ya un gran esfuerzo, y se agradece poder explorar tanto la isla Blood Edward como el Lago Juliet desde esta nueva perspectiva.

Dos viajes para encontrar la verdad

No es difícil darse cuenta de que ambos juegos quieren transmitir el mismo mensaje a través de su historia: es mejor conocer la verdad, por dolorosa que pueda ser.

Durante Two memories nuestra protagonista Ashley, viaja a una isla para conocer a su padre, a quien creía muerto. Resulta que por su 14º cumpleaños le ha llegado una carta de su propio padre donde afirma estar vivo y que se reúna con él en Blood Edward, una isla remota y que presuntamente lleva deshabitada varios años.

Obviamente la cosa no va como estaba planeada. Nuestra tía, quien nos acompaña en el viaje, desaparece al poco de llegar. Nuestro padre no da señales de vida y para rematar, resulta que conocemos al fantasma de un niño llamado D, que no tiene ningún recuerdo de lo que le ocurrió en vida.

En definitiva, Two Memories plantea suficientes misterios para que queramos avanzar a lo largo de su trama. Por desgracia, sus giros argumentales se ven venir de lejos, así que sorpresa como tal vas a encontrar poca. Aún así, sigue planteando dos tramas interesantes, por un lado la historia de D y el misterio de su muerte, y por otra la de Ashley y el misterio de su padre. Ambas preguntas plantean lo que ocurrió en la isla de Blood Edward, pero con 57 años de diferencia.

Por otro lado, en Más allá de la memoria avanzamos dos años en el tiempo, para descubrir a una Ashley en el inicio de su adolescencia. Mientras que ella busca averiguar qué ocurrió con su madre antes de que fuera asesinada, nos encontramos en otra ocasión la historia paralela de Matthew, un joven que ha escapado de casa (aunque cabe señalar que esta sub-historia no tiene el peso que tenía D en Two Memories, para lo bueno y para lo malo).

El hilo conductor

Lo que más curioso me parece es como Another Code: Recollection trata ambos juegos como una sola historia. Sí, existe claramente un hilo divisor entre ambos, pero la historia del segundo se ha cambiado y lo más importante: el juego te obliga a jugar a las entregas en orden.

Esto puede parecer una tontería, pero es una declaración de intenciones: esta es una historia completa, y dividirla, por mucho que la conozcas, no es como se debería jugar. A algunas personas, en especial quienes tengan más aprecio al título de Wii frente al de DS, les parecerá una mala decisión. Puedo entender esta crítica, pero creo que hace mucho bien a la historia de la saga que ambos juegos se consideren uno. Two Memories sirve de prologo casi, presentando a los personajes más importantes.

Voy a profundizar más en esto. Two Memories es el juego original, y al menos hasta donde yo sé es el más conocido. Pero en esta colección se siente como una introducción a la historia de Ashley. En parte porque la duración es significativamente más corta que Más allá de la memoria (unas 4-5 horas frente a unas 8-9 horas), y en parte por cómo está construida la historia.

Durante nuestro primer viaje tenemos que encontrar a nuestro padre, y de paso conocerlo. Esto el juego lo logra muy bien si te paras a observar la mansión y buscar los coleccionables (los cuáles vienen marcados en un mapa). Podemos ver cuáles son sus aficiones, en que pensaba mientras estaba en esta isla aislada del mundo, y muchos detalles que de verdad te hacen conocer a este personaje. Al final del juego ya lo conoces, y obviamente también conoces a Ashley después de controlarla durante toda la aventura, así que cuando empieza el segundo videojuego todas las bases ya están construidas para ir más allá.

Aunque todo sea dicho, me hubiera gustado que, tras pasar 4-5 horas conociendo a estos dos personajes, se hubiera profundizado más en su relación durante la segunda parte. Más allá de la Memoria quiere hablar de esto, pero los dos misterios principales llevan tanto tiempo y tanta atención, que al final Ashley y su padre apenas dialogan durante esta aventura. Esto se compensa, en parte, por la gran cantidad de personajes que presenta el juego. Durante Two Memories apenas hablaremos con nadie, pero en su secuela hablaremos con una buena variedad de personajes y conoceremos sus historias, lo cual da mucha más vida al juego.

Puzzles y cambios

Another Code no solo tiene texto, si no también un gameplay. Aunque es cierto que durante gran parte del tiempo estaremos sumergidos en la historia de Ashley y su familia, durante otra buena parte tendremos que resolver diferentes rompecabezas para poder avanzar.

Estos puzzles en Two Memories me recuerdan un poco a una escape room. No estamos encerrados como tal en un edificio, pero sí que existe este complejo sistema de puertas cerradas con llaves concretas, rodeado de pequeños puzzles que tenemos que revolver. algo que ayuda mucho al ritmo del juego.

Aquí entra una de las diferencias con los juegos originales: se han cambiado estos puzzles por completo. Ahora ya no tenemos cosas que interactúen con una pantalla táctil (así que se puede jugar en modo sobremesa sin problemas) y a cambio se han incluido algunos rompecabezas que necesitan del uso de giroscopio de los joycon (en el caso de usar un mando sin esta función, el juego ofrece una alternativa).

Lo mismo se aplica en Más allá de la memoria. Han cambiado los puzzles y, más importante aún, en la secuela ha cambiado también una parte muy importante de la historia. Al fin y al cabo, hablamos de un remake, no un remaster. Esto no trata de dejarlo simplemente bonito, si no que busca rehacer el juego base.

Por cerrar el tema de los cambios, otro de los más llamativos es como ha cambiado la mansión de los Edward, que ahora cuenta con un mapa detallado que hace más simple la navegación. ¿Es mejor o peor? Personalmente me inclino por mejor, ya que la mansión de los Edward ahora se siente de verdad como un lugar donde vivió, y vive en teoría, gente. Además que es muy simple utilizar atajos para moverse de forma más ágil.

En ninguno de los dos juegos los puzzles son algo demasiado exigente. Pero si que agradezco que intentar ser más un desafío de lógica, y no inspirarse demasiado en la filosofía de las aventuras gráficas más clásicas de “encuentra este objeto clave o no podrás avanzar”. Aún así no dejan de ser entretenidos y plantean conceptos interesantes, pero si lo que buscas es un desafío cognitivo, aquí no vas a encontrarlo.

La accesibilidad como diseño

Antes de nada, aquí hablo de accesibilidad en lo referido a la dificultad y la complejidad, no al acceso de los controles o herramientas que sirvan para personas que tengan alguna dificultad a la hora de jugar a algo, como problemas auditivos, de vista, motores, etc.

Another Code: Recollection es un gran punto de entrada para gente poco habituada al género o incluso a los videojuegos en sí mismos

Una vez aclarado esto, a veces se me olvida lo importante que es la accesibilidad en los videojuegos. Soy de los que abogan por un modo fácil, ya sea un selector de dificultad o por una mecánica que facilite las cosas a quien quiera, así que debería estar más atento.

Pero en Another Code: Recollection es imposible no darte cuenta de las facilidades que te ofrece el juego. En primer lugar, y lo más importante, tiene una opción para que una flecha te diga hasta donde tienes que ir para avanzar en la historia. Obviamente si solo haces caso a esto vas a omitir todos los detalles que el juego tiene por contarte, pero si te atascas por cualquier motivo es una herramienta perfecta. 

El juego también cuenta con un sistema de pistas, por si algún puzzle se te resiste, permitiendo que nadie se frustre en ningún momento de la experiencia. Además el juego te señala en qué salas están los coleccionables y cuenta con un esquema de las relaciones entre los personajes con información sobre ellos por si en algún momento te pierdes en el argumento u olvidas a alguien.

La definición de remake

Vivimos en una época donde las diferencias entre remake y remaster es cada día más difícil. Cada vez parece ser que se pide menos a los relanzamientos, basta con un lavado de cara y poco más. Pero los remakes, al menos como se suelen entender, es adaptar todos los apartados del juego original a los estándares modernos. Another Code: Recollection ha conseguido eso: ambos juegos en 3D con control libre, nuevos puzzles adaptados, parte de una nueva historia que contar y una gran accesibilidad. Incluso cuenta un decente doblaje (en inglés) en muchos de sus diálogos.

Quizás los jugadores más fan de la franquicia no encuentren lo que buscaban, porque los cambios pueden también no gustar. Pero en lo personal creo que Another Code: Recollection es un gran punto de entrada para gente poco habituada al género o incluso a los videojuegos en sí mismos, gracias a su gran accesibilidad. También creo que gustará a los fans que buscan revisitar los clásicos de culto originales disfrutando de una experiencia relativamente nueva.

Para finalizar, mil gracias a Nintendo España por la clave que me ha permitido realizar este análisis. Os podéis hacer con Another Code: Recollection en formato físico o a través de la eshop de Nintendo.